“La inteligencia artificial amenaza la existencia de nuestra civilización”, “La inteligencia artificial podría significar el fin de la raza humana”, “la IA podrá escribir ensayos en la escuela secundaria para 2026”.
Podría ser un buen comienzo para el trailer de una película veraniega, si no fuera por que son las palabras de Elon Musk, el multimillonario de Silicon Valley que pretende salvar la humanidad a lo Tony Stark, o de Stephen Hawking, el astrofísico más mediático de nuestro tiempo. La tercera frase suaviza un poco más la tensión, después de todo ¿no fusilan ya en internet los trabajos para clase? ¿de verdad nos da miedo que lo haga un servicio online por nosotros? El mismo estudio de la universidad de Cornell afirma que las IA podrán conducir un camión en 2027 y escribir un best-seller en 2049. Sospecho que algunos Best-Seller pueden estar escritos por algoritmos, que lo haga una inteligencia artificial supongo que hará más cómodo el proceso y algunos editores se pondrán contentos.
Lo extraño es que personas más inteligentes que yo persistan en un mensaje de miedo, en un mensaje que llena titulares y que nos arroja en manos de otros individuos que siguiéndoles el juego, hablan de regular a los robots con las cuatro leyes de la robótica de Asimov, un disparate que sería gracioso si no lo dijeran demasiado a menudo. ¿Qué pretenden? Hawking y Musk deberían dejar la ciencia ficción a autores como William Gibson, que en 1984 escribió “Neuromante”, una novela que trata sobre Inteligencias Artificiales en una pugna tangencial con el ser humano por sobrevivir. Best-seller y portada de Time, pero los ochenta ya pasaron y el Ciberpunk, la realidad virtual y los robots siguen estando muy lejos de ser peligrosos. Son titulares muy jugosos que pueden dañar la reputación de la ciencia informática que trabaja en que la inteligencia artificial ayude –de verdad– al ser humano.
Afortunadamente, un experto real en inteligencia artificial como Peter Bentley, desmonta estos titulares con una frase contundente ¿cómo vamos a crear una inteligencia más capaz que la humana si no alcanzamos a comprender ni los principios básicos de la mente humana?, ¿cómo van a adquirir autoconsciencia unos programas que sólo saben resolver los problemas para los que están diseñados? Es como pedirle a una calculadora científica que saque al perro. Ya hablé de ello en uno de mis primeros artículos sobre Inteligencia Artificial Autoconsciente, en el 2016.
la inteligencia artificial actual no supera a la de una rata
Yann Lecun, Facebook
Mucho más contundente, Yann Lecun, jefe del departamento de investigación de Inteligencia Artificial de Facebook, dijo hace unos días que “la inteligencia artificial actual no supera a la de una rata”. Duras palabras para alguien que se gana la vida con ello, un titular buenísimo pero que no vende diarios.
En casi cincuenta años de investigación, lo más cerca que ha estado una inteligencia sintética de dominar al hombre ha sido en ganar el Go, un juego asiático con más complejidad matemática que el Ajedrez. Dicen las malas lenguas de la darknet que existe código en la red que permite ganar dinero jugando al póker online. Queda mucho, mucho, para llegar a la temida Singularidad de la Inteligencia Artificial, momento en el cual, esta despierte. Un tema, por cierto, muy ciberpunk.
Puede que en el año 2024 las IA sean capaces de traducir textos mejor que los humanos, como dice el estudio de Cornell, pero lo cierto es hoy día Google translator el único daño que hace es a nuestros ojos cuando leemos algunos folletos de instrucciones. La irrupción del automóvil, internet y las telenovelas dejaron sin trabajo a mucha gente, pero no fue el fin del mundo, sino una nueva oportunidad para reinventarse. Dicen que los robots y las IA van a dejar en el paro a grandes sectores de la población. Lo mismo pasó cuando inventaron la televisión o el teléfono. La inteligencia artificial no es nuestro enemigo, sino nuestro aliado en un mundo cada vez mas complejo. En cualquier caso, estoy seguro de que la mayoría de personas que se pasan el día pegadas a una pantalla con un trabajo tan increíblemente aburrido, preferiría que su trabajo lo hicieran máquinas, inteligentes o no. Mezclamos el miedo a la supervivencia de la especie con el miedo a quedarnos sin trabajo, o incluso sin pareja sexual.
No temas a la voz de tu móvil cuando te sugiere algo, pero desconfía de los humanos que escriben titulares tendenciosos en los periódicos y de los que sin escribir ciencia ficción predicen el fin de la humanidad con precisión. Algo querrán: tu dinero o el de otro que busca una buena inversión. De momento la inteligencia artificial nos ayudará en pequeñas tareas. El mayor peligro está en que termines poniendo demasiada fe en algo que no lo merece.
La inteligencia artificial autoconsciente no existe, si no ya estarían escribiendo artículos como este para ocultarse del mayor peligro del planeta: nosotros.
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Jimmy Olano
Vuelvo a apostar por el software libre para que las grandes corporaciones dejen de monopolizar con patentes los desarrollos de inteligencia artificial, que bastante le hemos dado con dejar que conozcan todo acerca de nuestras vidas (bancos, trabajo, entorno social, etc.) ¿Repetiremos lo mostrado en la película Robocop donde un humano (bueno, el cerebro al menos, que ya es bastante) se impoga sobre las máquinas en una suerte de robot? Veo ese futuro sombrío más cercano nada más que de cualquier otro escenario, pienso yo.
Avedon
Aunque pongas barreras la gente de lanzará en masa a vender su libertad por un gamusino. Discutirán por el color. Es imposible ganar esa guerra, el ser humano no está hecho para ser libre.
David "Abutardaloca"
Estoy empezando a leer tu blog, muy interesante y refrescante, enhorabuena.
En cuanto al comentario, prefiero pensar que el ser humano es libre, otra cosa es la masa, que está aborregada y es esclava de unos pocos, creo yo.
Avedon
Gracias por comentar David y bienvenido.
Sobre tu comentario, creo que la libertad es algo relativo, hasta para los que «esclavizan» a otros.
Jorge Luis Acosta Torres
Me agrada tu análisis, pero en realidad yo veo otra amenaza más inmediata en las inteligencias artificiales que no tiene que ver con la dominación, y es el mal uso que las personas podrían darles. Hay muchísimos malos usos que le damos a la tecnología que tenemos. ¿Cómo vamos regular las leyes para evitar que hacker haga o altere una AI para cometa asesinatos saboteando autos, robe bancos, pensiones y ejecute toda la enorme carga ciber-crímenes que ya existen?, ¿y cuantos daños sociales, morales, etc se pueden llegar a infringir a través de ellas?
Avedon
Ya existen robots asesinos. Pero la coca cola (el azúcar) mata más gente probablemente. También podremos tener robots guardaespaldas e IA que contrasten noticias y desenmascaren a mentirosos por nosotros, mira el lado bueno ;)
Cherokke
Excelente como siempre, nada que añadir a los comentarios, pero ¿podrías aclararme lo de las leyes de Asimov? ¿A que te refieres con que es un disparate? Tenia entendido que cuando llegara el momento esas leyes serian útiles.
Abrazo
Avedon
Los postulados en que se basan son muy amplios. «Dañar al ser humano», por ejemplo, puede ser casi cualquier cosa, no es una regla lógica sino un postulado filosófico interpretable con demasiadas posibilidades.
Miguel Barrios Payares
Excelente entrada. Y sí, tal como lo dices, la cuestión es de mercados. Oferta/demanda. A mi modo de ver estos cambios serán mucho más lentos y menos vistos que las frases de Musk. Fíjate justamente en la impresión en 3D. Ahora en casi cualquier lugar se está empleando esta tecnología con maravillosos resultados. O por ejemplo las sugerencias de tráfico que aparecen en el teléfono antes de salir de casa. Toda la ciencia nos va tomando descuidados y cuando abrimos los ojos, ya es parte de nuestra cotidianidad. Cuando las IA lleguen, quizá estas conversaciones las tengamos con ellas y solo en ese momento lo notemos.
Saludos.
Avedon
Buen ejemplo el de la impresión 3D. Gracias por pasarte y comentar!
Jimmy Olano
«No temas a la voz de tu móvil cuando te sugiere algo, pero desconfía de los humanos que escriben titulares tendenciosos en los periódicos y de los que sin escribir ciencia ficción predicen el fin de la humanidad con precisión. Algo querrán: tu dinero o el de otro que busca una buena inversión.»
Sin pelos en la lengua, la realidad de hoy.
Jose Ant. Sánchez
Hola Nicholas, como siempre, interesante artículo.
Estoy de acuerdo contigo, a la Inteligencia Artificial le queda aún un largo camino para llamarse realmente Inteligente. Sin embargo, los de mi generación, que ya franqueamos los 50, hemos pasado de la radio y la «megatele» en B&N a los «smart» phone. Transitando extasiados por los cambios tecnológicos como un niño en un feria. Supongo que esta bulla que tenemos porque se desarrollen los androides con IA es fruto de la esperanza de que nos de tiempo a conocerlos antes de que nos convirtamos en solo datos.
Para nosotros, los actuales móviles ya son Ciencia Ficción en comparación con el trasto con rueda que teníamos en una mesita al lado del sofá. Y que en muchos casos funcionaba hasta con ruido electrostático.
Yo tengo claro que no veré a mi mayordomo/a androide como tampoco subiré a un coche volador. Aunque, con lo poco que me gusta viajar, esto último no sea tan placentero como lo primero.
Una pregunta, Amazon y cia se empeñan en regalarnos/asustarnos con tecnología domótica aunque hasta ahora casi toda se centraliza a través del móvil. ¿Crees mucho más cercano el hogar Inteligente? Ese que pregonan desde hace mucho y que aparece en libros y películas CiFi. El que dicen que está a la vuelta de la esquina. Esa casa que te recibe con un «Buenos días hombre, alegra esa carita que tampoco ha sido para tanto. Mira lo que te tengo preparado sin que hayas abierto todavía la boquita.» ;)))
Aunque yo me conformaba con una casa donde no tuviera que escuchar a los vecinos y, desgraciadamente, muchos serían felices tan solo con una casa con las mínimas condiciones.
Gracias por seguir compartiendo tus inquietudes Ciberpunkies.
Un Abrazo
Avedon
¿Casas inteligentes? ¿tenemos siquiera un ordenador inteligente? Hace 10 años estaba de moda la domótica, pero cada uno iba por su lado con sus integraciones de lo más pintoresco y vanal. Hace falta que se imponga un estándar fuerte, pero sobre todo que exista una demanda real que genere negocio. Como bien sabes, mi especialidad al construir mundos es el análisis de mercado y es en lo que me fijo. Ahora mismo no hay demanda y por mucho que se esfuerza Amazon y el resto en hacernos creer que vamos a ser más felices con un altavoz que todo lo oye, las ventajas aun no compensan. Amén de que la tecnología sigue estando muy por debajo de las expectativas de los que han visto Her ;)
Fíjate lo que te digo, el coche autónomo ya es posible, el metro autónomo es posible desde hace ¿30 años?, el avión autónomo desde hace ¿25 años?, pero no se impone por miedo al cambio, por resistencia social al cambio de modelo laboral, por un montón de motivos no-tecnológicos… la misma razón de por qué no estamos en Marte, por que no «compensa» socialmente dar un paso adelante. Lo más probable es que necesitemos un empujoncito para entender que la nación que utilice la tecnología, arriesgando su concepto de ética (por ejemplo, en el terreno militar) será la que marque el camino a seguir.
En resumen, que me embrollo… seguimos siendo muy conservadores en la aceptación de la tecnología, aunque parezca lo contrario… claro está que tipos como tú y yo, estamos deseando explorarla sin miedo, pero somos minoría.
Jose Ant. Sánchez
Uff, has hablado de HER. Eso son palabras mayores. Partiendo de la base que enamorarse de una voz ya está pasando. (Que se lo digan a la chica del antivirus. Y si encima fuera Inteligente!! La voz domótica digo, no la chica. ; ))
Aunque es cierto que la gente tiene mucho miedo a los cambios tecnológicos creo que tiene una influencia más negativa los intereses de empresas y gobiernos. Invertir en Tecnología, I+D, como en Sanidad o Educación, no les reporta intereses económicos inmediatos. Además, ellos sí pueden pagarse una «domótica» privada que se lo ponga todo por delante en bandejas de plata. (humana, no robótica)
Lo que resulta curioso es verº más miedo en la gente «joven» que en los de nuestra edad o incluso mayores. El tema de la privacidad «les preocupa tanto» que no se dan cuenta que en realidad ya no existe. Porque ponen su vida en la redes sociales como si fueran círculos íntimos. Y el problema de la pérdida de puestos de trabajo les horroriza sin darse cuenta que el mercado laboral existente ahora mismo no tendrá nada que ver con el que habrá que desempeñar dentro de unos años. Y lo peor, no se están preparando para ellos.
De todas formas, creo que en esto pasará como en otros ámbitos de la vida. En un pestañeo cambian las modas. Lo que ahora da pavor mañana puede ser demandado con ansias y devoción. Quién sabe, lo mismo en un par de años se empiezan a poner de MODA los implantes tecnológicos y nos volvemos CyberPunk antes de lo que pensamos.
;))))
Avedon
Los implantes están al caer. Yo creo que en menos de 25 años habrá mas gente con hardware encima de la que imaginamos. Lo de HER si que está lejos (¿una IA que se enamore de otra IA?), aunque espero que la VR inmersiva no tanto. Los Hikikomori son una tendencia que apunta a donde la tecnología puede llevar a parte de la sociedad. Ahora mismo el ser humano se puede enamorar de un ser inanimado que ni siquiera habla, o de un animal que solo deja pelo y mea, asi que no veo nada difícil que nos terminemos enganchando de un androide mecánico forrado de piel, pero de ahí a que la IA juegue con nosotros hay un trecho… y ya sabes, sin mentiras, no hay amor :-D
Jose Ant. Sánchez
«Ahora mismo el ser humano se puede enamorar de un ser inanimado que ni siquiera habla, o de un animal que solo deja pelo y mea»
jajaja. Qué razón tienes.
«sin mentiras, no hay amor»
(⊙⊙) jojojo.
Sé de varias que … no te darían besos precisamente. =)
Yo estaría loco por tener acceso a los SUEÑOS LÚCIDOS de tus «11.4 Sueños Luz» pero no creo que llegue a usarlos. O al menos no estarían a mi alcance.
Y las rodillas me las cambiaba por unas «güenas» biotecnológicas. 0_o
De todas formas, como dices, la tecnología avanza aunque seamos reacios a integrarla en nuestra vida. Y por mucha imaginación que tengamos, seguro que la realidad supera la ficción.
Aunque imagino que por tu cabeza hay un buen puñado de ideas dignas de Clark, Asimov, Dick, Bradbury…
Ojalá pueda leerlas. ;)