¿Qué es un cliché y por qué apesta?

Dando un paso más allá: Por qué una buena novela debería evitar los clichés

Imagínate caminar por una ruta que ya has recorrido mil veces. Las mismas piedras, los mismos árboles, sin sorpresas. Así se siente a veces leer una novela llena de clichés. Los clichés son como viejas historias que han perdido su chispa, y te voy a contar por qué una buena novela debería evitarlos.

En el vasto mundo de las novelas, la originalidad es como un faro que guía a los lectores a través de aguas inexploradas (esto mismo es un cliclé, no me lo tengas en cuenta). Los clichés, por otro lado, son como faros apagados; ya hemos visto su luz demasiadas veces (esto no es un cliclé, es una metáfora). Una buena novela busca sorprender, emocionar y llevar a los lectores a lugares nuevos. Evitar los clichés es el primer paso para crear algo único y especial. Lo mismo se aplica a los diálogos, pero eso es otra película.

La magia de la sorpresa

Los clichés son como recetas repetidas una y otra vez. En una buena novela, queremos el sabor de la sorpresa, no la misma mezcla predecible de ingredientes. Al evitar los clichés, los escritores tienen la oportunidad de tejer tramas frescas y personajes inesperados. La magia de una historia radica en su capacidad para mantenernos con los ojos abiertos y el corazón latiendo, y los clichés pueden apagar esa llama.

Personajes que rompen moldes (y a veces enamoran o a veces los odias).

En una novela emocionante, los personajes son como piezas de un rompecabezas. Los clichés, como los personajes estereotipados que hemos visto una y otra vez, encajan fácilmente en los espacios designados. Pero, ¿no es más emocionante cuando un personaje rompe esos moldes? Evitar clichés permite a los escritores crear personajes complejos y genuinos que desafían nuestras expectativas y nos hacen pensar. Me gusta pensar que mis personajes son así, por ejemplo Ariel de Santos. Imagínate un personaje que escribe poesía.

Conexión real con los lectores

¿Recuerdas cómo te sentiste la primera vez que leíste algo que realmente te tocó el corazón? Las novelas poderosas crean conexiones reales entre los lectores y las historias. Los clichés, al ser tan familiares, a menudo no logran ese impacto profundo. Una buena novela se esfuerza por resonar con la experiencia humana de maneras nuevas y auténticas.

Una novela (o un relato) sin clichés es como un viaje emocionante a lo desconocido. Al evitar las rutas trilladas, los escritores pueden ofrecer a los lectores la frescura y la emoción que buscan. Así que, la próxima vez que tomes un libro, busca la originalidad, la sorpresa y los personajes que desafíen las normas. Porque, al final del día, una buena novela es como un nuevo amigo que te lleva a lugares inexplorados, y los clichés son simplemente las huellas que preferimos dejar atrás.

Novelas sin cliclés

No puedo asegurar que ninguna de mis novelas tengan cliclés, seguramente los tengan, ¿por qué no pruebas a leer una?, haz click en una portada para más detalles.

P.D: Estás siendo parte de un experimento, quizás te hayas dado cuenta, quizás no, pero ¿no te parece raro que hable de estas cosas en mi blog?, en unos meses desvelaré el objeto del experimento, gracias por participar :-)