¿Quién soy?

Escribo sobre el futuro porque me cuesta aceptar el presente. La ciencia ficción, para mí, es una herramienta de disección: me ayuda a entender cómo las tecnologías, las estructuras de poder y las emociones se entrelazan en nuestra vida cotidiana sin que apenas lo notemos.

En 2016 publiqué “11,4 sueños luz”, mi primera novela y el inicio de una trilogía compuesta por “Lágrimas negras de Brin” e “Hijos de Brin”, que explora los límites de la identidad, la memoria y el deseo en un mundo cada vez más controlado por la información. Lo que empezó como un proyecto personal terminó resonando con miles de lectores.

Más recientemente escribí «Un reino feliz», una novela independiente que profundiza en el ascenso de los estados corporativos, la erosión de las libertades individuales y el papel ambiguo de la inteligencia artificial. Es mi forma de seguir preguntando: ¿hasta dónde estamos dispuestos a ceder con tal de vivir cómodos?

Soy experto en seguridad informática, y llevo más veinte años ligado al mundo corporativo. Esa experiencia me ha enseñado a desconfiar del código perfecto y del ser humano que cree entenderlo todo. Mis novelas se nutren de esa tensión: entre el control y el caos, entre la máquina y la carne.

En este espacio comparto relatos, ensayos y fragmentos de futuros posibles. No prometo verdades ni respuestas fáciles. Solo preguntas incómodas. Y, con suerte, una historia que te remueva por dentro.

Me llamo Nicholas Avedon. Y sí, es un seudónimo. Pero todo lo que escribo, soy yo.